Qué es APQ

¿Qué es APQ?

APQ son las siglas de Almacenamiento de Productos Químicos y hacen referencia al conjunto de instalaciones, normativas y medidas de seguridad necesarias para almacenar productos químicos peligrosos fuera de las zonas de uso inmediato.

En España, el almacenamiento APQ está regulado por una legislación específica que busca prevenir riesgos para las personas, el medio ambiente y las instalaciones.

Normativa de referencia

¿Qué regula el Reglamento APQ?

El reglamento APQ establece las condiciones técnicas y de seguridad obligatorias para:

  • Recipientes y contenedores de almacenamiento

  • Instalación y ubicación de los almacenes

  • Medidas de seguridad pasiva y activa (retención, ventilación, detección…)

  • Señalización y documentación

  • Inspecciones y revisiones periódicas obligatorias

¿Cómo identifico el peligro de un producto?

Todo producto químico debe tener una Ficha de Datos de Seguridad (FDS), donde se detalla:
Sección 2 – Identificación de peligros
Sección 14 – Información sobre transporte

Esto permite conocer su clase de peligro (según ADR: del 1 al 9), el tipo de almacenamiento permitido, la distancia de seguridad y la ITC aplicable del Reglamento APQ.

La tabla de pictogramas anterior te ayuda a interpretar visualmente estos riesgos.

Normativa aplicable según el año de la instalación

Antes de 2017

Se rigen por el Real Decreto 379/2001 y sus Instrucciones Técnicas Complementarias (ITC MIE-APQ 1 a 9)

Después de 2017

Aplican el Real Decreto 656/2017, que actualiza y sustituye parcialmente al anterior.

REACH (CE 1907/2006)

Registro y evaluación de sustancias químicas

CLP (CE 1272/2008)

Clasificación, etiquetado y envasado

ADR

Transporte de mercancías peligrosas

RD 2267/2004

Seguridad contra incendios

Ley 31/1995

revención de Riesgos Laborales

Directiva Seveso III (2012/18/UE)

ontrol de accidentes químicos graves

¿Qué riesgos existen si no se almacena correctamente?

El incumplimiento del Reglamento APQ puede tener graves consecuencias:

Incendio

Propagación rápida por vapores inflamables o incompatibilidades

Explosión

Reacciones químicas o sobrepresiones

Emisión de gases tóxicos

Intoxicaciones o daños a la salud

Reacción no controlada

Calor, gases peligrosos o productos corrosivos

Contaminación ambiental

Vertidos que afectan suelos y aguas

Deterioro de instalaciones

Corrosión, fallos estructurales

Riesgos para el personal

Enfermedades laborales, quemaduras o intoxicaciones

Sanciones legales

Multas, clausura o pérdida de autorizaciones

Responsabilidad penal

Posibles imputaciones por negligencia grave